La "Animita del Camino Real", un análisis a la luz de la historia

Capilla construida en devoción hacia la Animita del Camino Real

Fotografía tomada el 25 de mayo de 2019

Autor Sealtiel Enciso Pérez

En todos los pueblos de cualquier parte del mundo, se levantan monumentos que conmemoran un hecho o a un personaje, incluso real o ficticio, que sea poseedor de características extrahumanas y del cual se invoca su protección. En el caso del puerto de La Paz se cuenta con uno de ellos, el cual se denomina "La Animita del Camino Real". La capilla dedicada a este ser se localiza a un costado de la Sec. "José Ma. Morelos y Pavón", sobre la Calzada Agustín Olachea Avilés, unos 20 metros antes de conectarse con el Blvd. 5 de febrero.

El origen de la leyenda de la Animita data de la segunda mitad del siglo XIX. A decir del Profr. Juan Ramos Zepeda, no existen documentos en donde se pueda corroborar si el personaje realmente vivió así como tampoco los hechos que rodearon su tortura y muerte. La primer fuente bibliográfica con la que se cuenta sobre este hecho es un libro compilado por el Profr. Leonardo Reyes Silva y el cual se titula "Mitos, leyendas y tradiciones sudcalifornianas" y que fue impreso en el año de 2005. Sin embargo de acuerdo a información recabada por el Inf. Gilberto Amador Soto, en la parroquia de San Antonio se cuenta con una fe de bautizo de octubre de 1855 en donde dan cuenta del nacimiento de un niño de nombre José Lino de Jesús Manríquez Martínez, así como el nombre de sus padres. Bien pudiera tratarse de la misma persona, aunque el nombre del padre es diferente en lo narrado en la leyenda y como aparece en el mencionado documento.

La leyenda dice que el padre de José Lino de Jesús, el cual trabajaba como vigilante de un centro de diversiones, decide unirse a las fuerzas del Gral. Antonio Pedrín el cual en el año de 1866 fue depuesto como jefe de Gobierno del Territorio sur de la Baja California por el también Gral. José María Navarrete (en realidad el nombre de este General fue José Magaña Navarrete, pero la leyenda le cambia parte del nombre). Durante estos hechos, el padre de José Lino es apresado por las fuerzas de Navarrete y recluido en la cárcel de la ciudad bajo el mando del Cabo Crispín Sández.

Fotografía del año 2013 del interior de la Capilla de "la Animita"

(Fotografía semanario El Independiente)

En una de las ocasiones en que José Lino de Jesús va a llevar comida a su padre al cautiverio donde estaba, observa cómo es salvajemente golpeado por órdenes del demensial cabo Sández, y ante las preguntas del porqué de ese trato hacia su padre, se le contesta que esa misma tarde va a ser fusilado. Ante tal situación, el niño que tan sólo contaba con 11 años, le expresa al Cabo su intención de ofrecer su vida a cambio de a de su padre. El cabo acepta la propuesta y en la tarde lleva a cabo el sacrificio del infante, pero en lugar de fusilarlo lo amarra con una soga y lo arrastra entre los matorrales y choyas que había en el sitio donde se construyó la capilla de la animita. Al morir el niño, el cabo obliga al padre a que cave la tumba en donde descansarían los despojos del niño. Todo esto ocurrió el día 11 de noviembre de 1866.

Con el paso del tiempo y al conocerse la historia del martirio del niño, los habitantes de La Paz empiezan a acudir a rendir culto a este ser sacrificado de forma tan bárbara por el amor a su padre, y también inicia la petición de ayuda, principalmente para que interceda ante la divinidad para sanar niños enfermos o para que ayudara a concebir (que quedara encinta) a las mujeres. En la capillita era común encontrar cirios y veladoras prendidas así como "milagritos" prendidos de las peticiones que se dejaban en hojas o retazos de tela. Con el paso de los años este sitio fue cobrando más relevancia hasta que aprox. en 1959 o 1960 se construye una capilla en el sitio que se encuentra ahora, pero el cual no es donde originalmente estaba la tumba del niño José Lino de Jesús. El sitio original donde se encontraba la tumba era la esquina de Félix Ortega y 5 de febrero, donde actualmente hay un negocio de "McDonald". 

La razón de que a este sitio se le diga "del Camino Real" se debe a que este sitio era el entronque del camino levantado en el tiempo de los Jesuitas para comunicar a todas las Misiones de la California y por ahí pasaba el camino que unía el norte con el camino que iba al sur del Territorio. Este camino era el principal y tenía como característica estar bajo la protección del rey por lo que estaba penado con la muerte el que se le hiciera daño, además de estar bajo vigilancia y mantenimiento por parte del gobierno de la Corona.

En este deplorable estado se encontraba la Capilla de la Animita en el 2018

y por dentro estaba peor

(Fotografía propiedad de El Sudcalforniano)

Una persona asegura recordar que por allá de la primeros años de 1950 vio a un cortejo fúnebre de un miembro de la Familia Unzón que fue llevado al sitio de la Capilla de la Animita para ofrecerle el descanso eterno del alma del difunto, lo anterior nos relata la importancia que ya tenía este sitio para los paceños. También el Ing. Amador Soto relata que él investigó con un familiar de los albañiles que construyeron la capilla y narran que durante su construcción uno de ellos golpeó con una varilla uno de los cables de electricidad de un poste cercano lo que ocasionó la pérdida de una pierna y a otro un brazo, atribuyéndose a la Animita el que salvaran la vida de puro milagro.

Se dice que cuando se intentó hacer una sola vialidad de la Calzada Agustín Olachea Avilés y unir la calle Félix Ortega y Prolongación Isabel la Católica, en el año de 1982, ninguno de los operarios de maquinaria pesada quiso demoler la capilla de la Animita, ya sea por respeto o por temor hacia el espíritu del niño que ahí descansaba. Otra situación que se comenta es que colindando con el predio donde está la Capilla de la Animita del Camino Real, donde en los 80´s y 90´s estuvo una papelería de nombre "Agruel", se remodeló para que fuera ocupada por un "Oxxo" en la primera década de los 2000s, y que este sitio fue cerrado y cambiado unos metros adelante debido a que por las noches, un fantasma con forma de niño se les aparecía a los empleados del sitio, motivo por el cual ya nadie quería trabajar en esta tienda de conveniencia. Al platicar con personas que conocen más del caso nos dicen que esto es falso ya que la razón del cambio de sitio del "Oxxo" fue porque no se les permitía vender bebidas alcohólicas por estar a unos metros de una Escuela. Lo anterior motivó que se movieran a un sitio en donde la prohibición se quitara.

Al analizar con detalle esta leyenda surgen las siguientes interrogantes que hacen dudar sobre la autenticidad y veracidad de esta leyenda:

1. El puerto de La Paz inició su poblamiento en el año de 1823, esto es, sólo 43 años antes de que ocurriera el supuesto hecho de la muerte del niño mártir. En un plano consultado por su servidor, de la Mapoteca Manuel Orozco y Berra. Varilla OYBBC02. No. 792-OYB-7221-B de feha 1857, 9 años antes del suceso, la ciudad de La Paz se restringía a las construcciones que había desde la calle Alvaro Obregón, bordeaba la 16 de septiembre hasta la Francisco I. Madero y bajaba otra vez al malecón por la calle Degollado (Lerdo de Tejada). Con base a lo anterior el sitio donde supuestamente el niño José Lino de Jesús fue muerto quedaba a unos 3.5 kilómetros de distancia de la parte habitada del puerto, en un sitio donde no había absolutamente nada, sólo plantas del monte y animales mesteños. Es poco probable que fue hasta este sitio donde se traslada al niño y al padre para cometer el cruel acto.

Lamentable estado en que se encuentra el interior de la Capilla de la Animita

Los indigentes han hecho su guarida y sanitario de este sitio sin vigilancia

2. El gral. Magaña Navarrete sólo estuvo en el poder de Junio a Octubre de 1866 en donde fue depuesto como gobernador por el Gral Pedrín, y se anota en la leyenda que el niño murió el 11 de noviembre de este año. Con lo anterior se observa una incongruencia de fechas ya que si el hecho ocurrió en Noviembre, ya para entonces estaba en el poder el bando militar al cual pertenecía el padre de José Lino de Jesús, así que era nada probable que ellos mismos lo azotaran y luego mataran a su hijo con tremenda saña.

Mi hipótesis es que la leyenda de la Animita del Camino Real fue producto del imaginario popular de la población que estaba llegando a nuestra ciudad y que venía de diferentes sitios de México y de otros países, en donde eran comunes estos hechos de martirios y suplicios que generaban santos y santas en aquellas regiones. Por ejemplo, en Sahuayo, Michoacán existe una leyenda que narra que el adolescente José Sánchez del Río fue martirizado y sacrificado por los soldados leales al gobierno. Lo anterior debido a su fervor religioso. El martirio que se le aplicó fue desollarle la planta de los pies y hacerlo caminar sobre sal, posteriormente llevarlo caminando hasta el panteón donde fue apuñalado hasta morir y luego rematado con 2 tiros en la cabeza. Esta población deseaba que aquí en la parte austral de la California también tuviera sus mártires y así poder recrear las tradiciones en este rincón de México.

Limpieza que se hizo del sitio con recursos aportados por los integrantes

de la generación de egresados de la Sec. "José Ma. Morelos" en el año de 1968

Mi reconocimiento para este grupo de ciudadanos preocupados por los sitios históricos

Finalmente agrego que el término Animita se puede utilizar en dos sentidos. Uno como el alma o ánimo de un ser humano ya fallecido que "escucha" las peticiones que se le hacen con fervor e intercede por ellas ante la divinidad. En este caso se le da el término diminutivo por ser de un "niño". Sin embargo en Chile, y los historiadores saben que la California, ha sido patria de personas procedentes de casi todos los países de América y Europa, el término "Animita" es muy empleado y se refiere a "un lugar de veneración religiosa o mitológica, generalmente desarrollado como una capilla, ermita, santuario o templete, que recuerda un hecho trágico en espacios públicos. También se establece como sitio de veneración informal de santidades o personajes a quienes se atribuye alguna característica extraterrenal. 

En Sudamérica, producto de una combinación de creencias como el animismo, politeísmo y religiones convencionales, es habitual reconocer estos espacios en plena vía pública.

Se entiende que los fallecidos en circunstancias trágicas dejan su alma o ánima vagando en el lugar donde cayeron o fueron sepultados y de esta forma necesitan de la construcción de los templetes donde sus deudos le pondrán velas. Entonces, le pueden pedir que intervenga frente a santos o el mismo Dios para que les soluciones problemas, y si este asunto es resuelto, el deudo le debe agradecer poniéndole una placa. A medida que se juntan las placas, se entiende que es una animita milagrosa y aumenta la cantidad de fieles. De esta forma las animitas vienen a cumplir (o suplir) la función de los santos populares en otras naciones católicas. La diferencia está en que la Iglesia católica acepta como santos a personas de intachable conducta y tras un proceso; mientras que las animitas pueden pertenecer a delincuentes fusilados, agnósticos o simples personas muertas trágicamente. Por esta razón la Iglesia Católica no acepta este tipo de culto aunque las personas que lo practican no lo ven como «anticatólico», sino todo lo contrario, como una parte de la Iglesia." (Wikipedia).

Amigo Lector, el presente texto no pretende afectar a nadie, sólo deseo dar a conocer lo que he investigado al respecto. Cada quien tendrá la mejor opinión, la cual por lo menos para mí, es sagrada y es su derecho..