Ensenada de La Paz, 1913 (archivo de la familia Uribe Mendoza).
Autor Sealtiel Enciso Pérez
León Diguet fue un ingeniero francés que llegó desde Francia a trabajar a la compañía El Boleo, en el mineral de Santa Rosalía, sin embargo durante los viajes de exploración y a través de las fotografías que realizó de diferentes lugares, flora y fauna y personas de la región, es que descubriría su verdadera vocación la cual fue la colección de materiales sobre la cultura de grupos nativos de México y América así como la escritura de libros donde narraba sus hallazgos. A continuación transcribimos un relato que realizó en el año de 1912 en su libro "Reseña geográfica y estadística de 1912":
"Rodeada de montañas de mediana elevación y asentada en anfiteatro parte sobre una meseta, parte sobre un declive que llega al nivel del mar, la villa de La Paz se presenta bajo un aspecto de lo más pintoresco.
Las calles derechas y bien alineadas están cubiertas de sombra por plantaciones de árboles.
Las casas, que casi todas tienen jardín, son generalmente bajas y están construidas con piedras volcánicas, con ladrillos, o con adobes, y aún hay algunas de madera.
El agua potable lo suministran pozos, o la canalización de un manantial de las cercanías.
Cada casa tiene su pozo y una máquina para elevar el agua, movida por un molino de viento.
Lo que hace vivir a la población obrera es, principalmente, la pesca de las perlas y el tráfico de las minas del Real de San Antonio, así como los ranchos y diferentes explotaciones que existen en las cercanías.
El puerto de La Paz constituye un abrigo seguro para los navíos de medio porte, y está formado por un estrecho canal de seis a ocho metros de profundidad, que se encuentra entre la tierra firme y una lengua de arena baja que llaman Mogote."
Bibliografía:
Crónicas de mi puerto La Paz 1830-1959 Rosa María Mendoza Salgado
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