Autor: Sealtiel Enciso Pérez
Las generaciones de adultos
jóvenes, menores de 40 años han disfrutado de los logros que los valientes
sudcalifornianos de antaño nos legaron: un Estado libre y soberano, servicios
médicos como el IMSS y el ISSSTE, la reducción significativa de epidemias como
la tuberculosis y el paludismo. Sin embargo pocos son los que recuerdan a
quienes lucharon de forma persistente e incluso a riesgo de su propia vida, con tal de
sembrar la semilla del futuro promisorio que hoy tenemos y que muchos de esos
luchadores ya no pudieron ver cristalizados, su meta era luchar por que las
bases quedaran cimentadas. Tal fue el caso del Profesor y Doctor Francisco
Cardoza Carballo.
Cardoza Carballo nació en
este puerto de La Paz el 4 de mayo de 1913. En esos momentos, al interior del
país acababa de ocurrir la tristemente célebre “Decena trágica” que concluyó
con el asesinato del presidente Francisco I. Madero y el vicepresidente José
Ma. Pino Suárez. Este suceso marcaría el derrotero de los siguientes 8 años del
país en que se vio sumido en una gran revuelta la cual fue denominada “La
Revolución Mexicana”. En nuestro estado también se dieron episodios de
enfrentamiento entre los grupos armados a favor del restablecimiento del
Gobierno Legal y Legítimo y las fuerzas del Gobierno, leales en ese entonces al
traidor Victoriano Huerta. Nuestro personaje, el Dr. Francisco Cardoza iniciaba
así su vida en este mundo, bajo el signo del cambio y de la rebeldía ante las
imposiciones de la dictadura.
Al ingresar a la escuela
primaria se distinguió por ser un alumno destacado, con buenas calificaciones,
es por ello que sus padres lo apoyan para que ingrese a la Escuela Normal de
Profesores, en esta ciudad capital, después convertida en escuela Normal
Regional. Posteriormente se traslada a la Ciudad de México en donde estudia en
la Escuela Nacional de Maestros graduándose con la especialidad de maestro de
enseñanza superior el año 1933. Sin darse tregua para descansar, cursó el
bachillerato y la carrera de Medicina, de la cual se graduó con honores en el
año de 1940.
Con 37 años cumplidos y con
toda la vitalidad a cuestas decide regresar a su tierra natal, la cual estaba
gobernada en ese entonces por el Gral. Francisco J. Múgica Velázquez, el cual
de inmediato lo contrata y destina para atender el grave problema de las
cientos de personas contagiadas con tuberculosis. Esta enfermedad es altamente
contagiosa puesto que se dispersa de forma aeróbica a través de las partículas
de saliva que expelen los enfermos. Esta plaga estaba muy diseminada en aquellos
años sobre todo en las rancherías y comunidades aisladas en toda la geografía
peninsular.
Es así como el Dr. Francisco
Cardoza, conocido cariñosamente por su mote de infancia como “Lico” Cardoza,
inicia la construcción del famoso Sanatorio Antituberculosos “Roberto Koch” el
cual se situó en la esquina de las calles Nicolás Bravo y Lic. Primo Verdad. En
este sitio se ofrecía diagnóstico y atención médica a todas las personas que
estaban contagiadas de este mal así como internamiento de aquellos pacientes
que por lo avanzado de su enfermedad requerían de cuidados permanentes. Algo
que caracterizó al Dr. Cardoza fue su gran espíritu humanista, lo que se puso
una vez más de manifiesto al darse cuenta que los hijos pequeños de las
personas contagiadas por esta mortal enfermedad de la tuberculosis, quedaban en
el desamparo por carecer de familiares que pudieran o quisieran hacerse cargo
de ellos mientras sus padres estaban siendo atendidos en el sanatorio. Es por
lo anterior que promueve la creación del “Preventorio de familiares de
pacientes tuberculosos” en el cual se atendían a estas personas mientras sus
padres eran sometidos a tratamientos médicos. Este sitio estuvo ubicado en la
esquina de 5 de mayo e Ignacio Ramírez, donde actualmente es el Jardín de Niños
“Rosaura Zapata Cano” en esta ciudad de La Paz. Esta cruzada de salubridad fue
sumamente exitosa con lo que se incrementó la cantidad de personas que se
curaban y se disminuyó el riesgo de contagio de esta enfermedad.
Dentro de su vasta obra profesional,
el Dr. Cardoza Carballo, cuenta con haber sido el promotor y fundador de la
Sociedad de Médicos en la entidad. Posteriormente fue fundador y director de
los servicios médicos del IMSS y del ISSSTE en Baja California Sur.
Algunos años antes había
contraído matrimonio con la señorita María Asunción Macías Pérez, en cuya unión
procrearon cuatro hijos, de los cuales Francisco y Rubén Cardoza Macías se
dedicaron a la profesión médica, haciendo honor con su trabajo y entrega al
legado que sus padres les heredaron.
Hablar del doctor Francisco
Cardoza Carballo es hablar también de su papel dentro de los movimientos
políticos del territorio. Desde principios del siglo XX ya existía entre los
líderes sociales de nuestro territorio una gran efervescencia por ser tomados
en cuenta en los cargos de relevancia, pero hasta el año de 1945 se funda el
famoso “Frente de Unificación Sudcaliforniano, el FUS por sus siglas, el cual
buscaba que el Gobierno Federal volteara su mirada hacia esta parte de la
geografía mexicana y diera los apoyos necesarios que Baja California Sur
merecía. Aunado a lo anterior y como consecuencia de lo mismo, se pugnaba por
que los sudcalifornianos decidiéramos de forma libre y directa a nuestro
gobernante territorial y como requisitos necesarios se pedía que fuera nativo
de Sudcalifornia y que hubiera nacido y/o vivido por varios años en estas
latitudes (con arraigo).
Como ya mencionamos, en los
años en que el Dr. Cardoza Carballo se integró con fuerza al “FUS”, había sido
designado como Gobernador y jefe político del territorio el Gral. Francisco J.
Múgica, el cual siendo de espíritu liberal y convencido plenamente de la
legitimidad y honorabilidad de este sentimiento “nativista”, a finales del año
de 1945, pone en manos de los integrantes de la dirigencia del FUS, entre ellos
el Dr. Francisco Cardoza, su renuncia al puesto que ostentaba, para que
acudieran ante el presidente Manuel Ávila Camacho y le externaran sus peticiones
tan anheladas. Y es así como esta pléyade de nobles hijos de esta tierra
Californiana, se dirigen a las oficinas del Presidente de la República en
Palacio Nacional y le entregan el documento ya citado y plantean sus
pretensiones. Al siguiente día obtienen la respuesta favorable del mandatario
el cual designa al Gral. José Agustín Olachea Avilés para que sea el nuevo
gobernador y jefe político del Territorio. Es importante mencionar que el Gral.
Olachea era nativo de Sudcalifornia y que en el periodo de 1929 a 1931 ya había
sido gobernador de este territorio.
Para el Dr. Francisco
Cardoza Carballo, hombre de honor y de ideales bien definidos, la llegada del
Gral. Agustín Olachea a la dirigencia del territorio daba por cumplida las
peticiones que el FUS planteaba por lo que se niega a formar parte del Gabinete
Territorial, puesto que él no buscaba nada para sí mismo, y se retira a
desempeñar sus funciones como Galeno reconocido y prestigiado. Lamentablemente,
con la salida del Gral. Olachea de la jefatura política del territorio, en el
año de 1956, los encargados del despacho así como los nuevos nombramientos como
gobernadores eran para personas no nacidas en Sudcalifornia ni enteradas de las
necesidades de los habitantes de estas tierras, echaron al caño las conquistas
cívicas obtenidas. Por tal motivo, a partir del año de 1958, el Dr. Cardoza
Carballo reactiva su participación dentro del FUS, teniendo un papel destacado
en mítines multitudinarios, marchas, reportajes en radio, televisión y prensa
escrita. Durante el gobierno del Gral. Bonifacio Salinas Leal, él y otros
destacados miembros del FUS sufrieron represalias y acoso por parte de personas
ampliamente reconocidas como “golpeadores y matones” leales al gobernador
Salinas. Sin embargo ni con eso amilanaron o restaron el valor y arrojo de este
gran sudcaliforniano.
En el año de 1970, el
movimiento que gestaron muchos años atrás el Dr. Carballo y muchos valientes
sudcalifornianos, tuvo un papel preponderante en la Magna Concentración celebrada
en la primera Capital de Las Californias, Loreto, y a partir de este evento se
redefine la política del Gobierno Federal hacia nuestro estado designándose a
un gobernador que cumple con los caros deseos planteados por el FUS en la
persona del Profr. e Ing. Félix Agramont Cota. Finalmente en el año de 1975,
nuestro territorio se convierte en Estado Libre y Soberano y se elige por
sufragio efectivo al primer gobernador, el Lic. Angel César Mendoza Arámburo.
El Dr. Cardoza, fundó la
clínica “Nuestra Señora de La Paz”, donde ejerció privadamente su profesión aún
después de su haberse jubilado de su trabajo en las diversas instituciones de
gobierno que formó parte.
Fue el 12 de abril del año
2009 que el Dr. Francisco Cardoza Carballo, a la edad de 96 años, fallece
tranquilamente y en paz, rodeado por sus seres queridos.
Hombres y Mujeres del temple
ya descrito son los que se necesitarán en todos los momentos de nuestra
historia. Que la memoria de todos los sudcalifornianos tenga siempre presente
la vida y obra de sus hijos más destacados, para que en los momentos de
tribulación recordemos su ejemplo y sea estandarte y brújula para salir avante
de cualquier suceso. Una muestra del aprecio y respeto por la trayectoria del
Doctor Francisco Cardoza Carballo se demostraría al trasladar sus restos
mortales a la Rotonda de los Sudcalifornianos Ilustres, sitio en el que
demostró con creces que debería de estar.
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