De cómo Hernán Cortés creyó haber encontrado la fantástica Ciguatán, en la California

Alegoría de Cortés desembarcando en la tierra de Ciguatán - California

Autor Sealtiel Enciso Pérez

La caída histórica de la gran Tenochtitlán ocurrió en el año de 1521 provocada por la acometida de miles de naturales, habitantes de los alrededores de la mencionada ciudad y encabezados por una alianza de sus jefes tribales y una minoría de codiciosos y degenerados españoles. Al año siguiente, el codicioso explorador Hernán Cortés envía a un grupo de españoles a que indaguen si en las regiones del este de la tierra a la que recién habían avasallado existían riquezas que pudieran alimentar su sed insaciable de perlas. joyas y metales preciosos.

En la cuarta Carta de Relación que Cortés dirigió al emperador Carlos V, fechada en México el 15 de octubre de 1524, refiriéndose a los informes del capitán que mandó de expedición a las provincias de Colimán, se lee : ". . .Y así mismo me trujo relación de los señores de la provincia de Ciguatán, que se afirman mucho haber una isla poblada de mujeres sin varón ninguno, y que en ciertos  tiempos van de la Tierra Firme hombres con los cuales han acceso. . . , y si paren mujeres las guardan y si hombres los echan de su compañía ; y que esta isla está diez jornadas desta provincia, y que muchos dellos han ido más allá y la han visto. Dícenme así mismo que es muy rica de perlas y oro".

Motivado por estos reportes pero sobre todo por la codicia inicia una serie de expediciones para buscar y encontrar esta tierra de Ciguatán de la que hablaban los naturales. Es muy probable que esta ambición se vio reforzada por lo que se relataba en el libro de "Las Sergas de Esplandián", lo cual hizo que no dudara ni un segundo que estaba frente a él la posibilidad de encontrar una tierra, isla seguramente, con riquezas inimaginables que lo convertirían en el hombre más rico de su tiempo.

Bibliografía:

Cuarta Carta de Relación que Cortés dirigió al emperador Carlos V.